SOBREENTRENAMIENTO: LA RAZÓN POR LA QUE LOS DEPORTISTAS DE ÉLITE DEBEN REALIZARSE TANTOS ANÁLISIS
El ejercicio físico es muy importante, pero también es esencial realizar los descansos adecuados. Si no, se puede experimentar algo conocido como síndrome de sobreentrenamiento. Esto es bastante común en deportistas de élite, pues intentan llevar su cuerpo al límite. Están muy bien preparados físicamente; pero, aun así, un exceso de ejercicio puede pasarles factura, tanto física como psicológica.
Por eso, en estos deportistas es muy importante realizar un seguimiento médico, con analíticas frecuentes. Hasta ahora, no se ha logrado encontrar una forma de predecir el síndrome de sobreentrenamiento. Es decir, no se ha visto qué factores hacen a unos deportistas más propensos que otros. En algunas ocasiones se ha apuntado a la motivación como posible causa, pero no hay suficiente evidencia científica. Por eso, las analíticas regulares en las que se miden una serie de marcadores concretos pueden ayudar a comprobar si se está llegando al límite. Estos marcadores son muy variados, van desde algunas hormonas hasta neurotransmisores, pasando por ciertos aminoácidos.
Todo esto es muy importante para los deportistas de élite. Y es que el síndrome de sobreentrenamiento no solo afecta a su salud. También afecta a su rendimiento, por lo que no les vale la pena en absolutamente ningún sentido.
Consecuencias de pasarse con el ejercicio
En otra publicación de este blog vimos lo que es la rabdomiólisis. Esta se da cuando los músculos se fuerzan tanto que se dañan, liberando sustancias que se acumulan en la sangre. Estas son filtradas por los riñones. Sin embargo, si se liberan en grandes cantidades, puede que estos órganos no den abasto y acaben corriendo peligro. Por eso, es importante detectar la rabdomiólisis antes de que sea demasiado tarde.
Los deportistas de élite no están tan expuestos a esta afección, pues tienen músculos muy preparados para soportar ejercicios intensos. Sin embargo, su rendimiento sí que puede verse afectado de dos formas. Ya sea con el síndrome de sobreentrenamiento (OT por sus siglas en inglés) o con otro, que a veces se confunde, llamado síndrome de sobresolicitación (OR por sus siglas en inglés).
El síndrome OR se da cuando se llega a un punto en que el exceso de entrenamiento comienza a afectar ligeramente al rendimiento. Por suerte, se soluciona fácilmente en unas dos semanas si se disminuye el entrenamiento. Esto puede hacerse con un descanso activo, consistente en la disminución de cargas, o pasivo, cuando no se realiza ningún tipo de actividad.
Si no se ponen medidas con el OR, se puede caer en un OT. En esos casos, empiezan a aparecer síntomas como fatiga, disminución del rendimiento físico, bajo estado anímico, inflamación muscular, trastornos del sueño y alteración del ritmo cardíaco y la tensión arterial. Si se detectan estos síntomas, es importante recurrir a los descansos adecuados, aunque, llegados a este punto, se necesitará mucho más tiempo.
¿Cómo se detecta el sobreentrenamiento?
Se ha observado que hay muchos marcadores en sangre que ayudan a detectar el sobreentrenamiento.
Dado que se produce por un exceso de estrés, tanto físico como mental, uno de los marcadores idóneos es el cortisol. Este se conoce como la hormona del estrés y, dado que sus niveles fluctúan a lo largo del día, se suelen tomar varias muestras de sangre o recoger toda la orina del día para medirlo.
Por los mismos motivos, se analizan también las catecolaminas. Estas son hormonas que actúan como neurotransmisores y que se liberan como respuesta al estrés, tanto físico como mental.
Pero no solo se mide el estrés. También se analizan los niveles de hormonas como la testosterona, cuyos niveles se relacionan con el esfuerzo de dos formas diferentes. Por un lado, si el esfuerzo es reducido, se ha visto que sus niveles aumentan. En cambio, cuando el esfuerzo es muy elevado, la testosterona disminuye notablemente. Por eso, el cociente testosterona/cortisol se considera un buen marcador para detectar el sobreentrenamiento.
Y no todo son hormonas. Por ejemplo, otro marcador importante es el ácido láctico. Esta es una sustancia que se libera cuando los músculos realizan ejercicios físicos intensos. De hecho, hubo una época en la que se pensó que las agujetas eran el resultado de la formación de cristales de ácido láctico. Hoy en día sabemos que en realidad el ácido láctico solo causa una leve sensación de ardor muscular durante el ejercicio. Pero, en realidad, las agujetas se deben a microrroturas de los músculos.
Ahora bien, dejando esa anécdota a un lado, se ha visto que, si el esfuerzo físico es excesivo y no se compensa con un descanso adecuado, los niveles máximos de lactato terminan disminuyendo. Los músculos no pueden más.
Finalmente, hay estudios que apuntan a que el sobreentrenamiento también altera los niveles de otras sustancias, como el hierro en sangre, por lo que es interesante medirlo en deportistas de alto rendimiento.
Analíticas y más analíticas
Hasta que haya otra forma mejor de detectar el sobreentrenamiento, a día de hoy la única técnica es realizar analíticas frecuentes a los deportistas.
Se empiezan a tomar muestras periódicas cuando comienzan ciclos de entrenamiento intenso. Así, en caso de que se detecten cambios en los niveles de algunas de las sustancias antes mencionadas, se deben variar las pautas de descanso.
Además, más allá de las analíticas, no se deben perder de vista la saturación de oxígeno, la presión arterial y el ritmo cardíaco. Y también es importante que tengan seguimiento psicológico. Se ha comprobado que el estrés mental, muy habitual en deportistas de élite, puede conducir al sobreentrenamiento. Esto se puede cuantificar con los niveles de cortisol, pero un psicólogo puede ayudar a detectar síntomas externos y, sobre todo, tiene las claves para intentar detenerlo.
En definitiva, no todo son analíticas para detectar posibles casos de dopaje. También son necesarias para evitar que el entrenamiento excesivo termine siendo contraproducente.
Azucena Martín Sevilla, Licenciada en Biotecnología
BIBLIOGRAFÍA
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-Carrard J, Rigort AC, Appenzeller-Herzog C, Colledge F, Königstein K, Hinrichs T, Schmidt-Trucksäss A. Diagnosing Overtraining Syndrome: A Scoping Review. Sports Health. 2022 Sep-Oct;14(5):665-673. doi: 10.1177/19417381211044739. Epub 2021 Sep 9. PMID: 34496702; PMCID: PMC9460078.
